Reencuentro con cuento

De pequeña me encantaban los cuentos. Recuerdo que tenía una cesta llena de cuentos pequeñitos bajo la cama, y me encantaba leerlos una y otra vez. No recuerdo dónde quedó la cesta, se perdió y con ella los cuentos y con ella la infancia y con ella el juego y con ella...¡qué de cosas había en la cesta!¡qué de cosas perdí con lo cuentos!
Pero un día, los cuentos salieron a mi encuentro y con ellos volvió la infancia, el juego, la imaginación , el color, la creatividad...
Me reencontré con los cuentos y con la literatura infantil en un curso de animación a la lectura y creo que ha sido de los cursos más provechosos y enriquecedores que he hecho. Desde entonces no me he separado de los cuentos, de los álbumes ilustrados y son uno de mis tesoros más preciados. He descubierto en ellos una manera de disfrutar a nivel personal pero, sobretodo, he descubierto en ellos un enorme potencial como recurso educativo y una manera de entender y descubrir el mundo infantil.
Y es que si buscas, hay miles de cuentos a partir de los que desarrollar estupendos programas educativos, miles de historias y personajes con los que motivar a los niños y niñas, con los que dejar volar la imaginación y perdernos en la fantasía para aprender de la realidad que nos rodea.
Hace poco leía esto:
"Los cuentos pueden utilizarse para dormir, pero también hay cuentos para despertar: estos son los que abren los ojos del alma de quien lo lee o escucha. Hay cuentos que abren las ventanas de la mente y amplían la visión del mundo que nos rodea. Nos dice la escritora del reportaje que por medio de los relatos, los niños desarrollan habilidades como escuchar, visualizar y fantasear. Los cuentos contribuyen a potenciar la imaginación y transmitir valores positivos en los niños".

Únicamente añadiría que no sólo los niños desarrollan habilidades, también los adultos, quizás porque podemos recuperar a través de ellos algo de nuestra infancia.
Y una vez que te animas a leer, a escenificar historias, ¿por qué no animarnos a escribir y contar las nuestras? ¿a crear historias propias? y ¿por qué no motivar a nuestro alumnado a crear las suyas de manera individual? y...más divertido aún de manera colectiva, a inventar cuentos con los sentidos, con los colores...
Y cómo esto que os cuento no quiero que quede en un "contar sin más" sino en una historia de acción, os invito a ponerlo en práctica con eso de "como muestra un botón" o, en este caso, un montón de cuentos.
Así que quiero compartir con vosotras y vosotros algunos de los cuentos que más me gustan e invitaros a crear.Os muestro los cuentos, y os invito a crear un cuento común en el apartado de comentarios, que es la única manera de la que he sabido hacerlo(si alguien conoce una opción mejor, que no dude en "contarla"). Así que "Junt@s contamos" en formato comentarios.

He seleccionado algunos de los cuentos que más me gustan y a partir de los que considero que se pueden desarrollar programas y actividades para diferentes edades, desde infantil a tercer ciclo de Educación Primaria, y por supuesto disfrutar de manera individual de su lectura y regalar la sonrisa que te arrancan.

¡Pues  sí! Había una vez un árbol con hojas DIN A-4 y cuando llegó el otoño, sus frutos fueron letras que volaron con el viento, lo ríos....
Escrito Por Carles Cano y editado por Kalandraka. ¿Temas a trabajar a partir de este cuento?historias a partir de frases o palabras, la importancia de lo árboles como fuente para elaborar el papel. la importancia de la conservación de los bosques, el uso de papel reciclado...

Había una vez un lugar grande y desolado..
Pero en él creció una ilusión y floreció la esperanza.

Cuento escrito por Helen Ward y con unas bellísimas ilustraciones de Wayne Anderson.

Editado por Timun Mas.

Ideas para trabajar a partir de este cuento: la reducción de residuos, la compra responsable, la separación de envases y la posibilidad de conseguir lo que nos proponemos.

¿Qué haces si tu regalo es un trozo de tela? ¿o qué no haces?
Para descubrirlo tendréis que leer el cuento.

Escrito por Mar Azcona y editado por Kalandraka.
Para trabajar: la sencillez de las cosas, la imaginación, la creatividad.

¿Qué se le regala a alguien que lo tiene todo?
Pues este cuento nos ofrece una estupenda alternativa.

Escrito por Patrick Mc Donnell y editado por Serres.

Podemos trabajar temas relacionados con el consumismo,

la importancia de la amistad, lo necesario y lo no necesario...

¿Un poquito ácido? cuanto menos sorprendente y en mi opinión un estupendo ejercicio de reflexión para los adultos

y las relaciones de pareja.
Escrito por Jaen Willis, ilustrado por Tony Ross (un clásico de la literatura infantil) y editado por Serres.
Para trabajar: ¡¡¡pufff!!! cómo mínimo la "metarmofosis".

De Roald Dahl, con ilustraciones de Quentin Blake.

Editado por Altea.

Para disfrutar, divertirse y reír

Y para daros alguna pista de lo que os encontraréis:

La Cenicienta

¡Si ya nos la sabemos de memoria!, diréis.
Y, sin embargo, de esta historia tenéis una versión falsificad

rosada, tonta, cursi, azucarada,

que alguien con la mollera un poco rancia

consideró mejor para la infancia...